lunes, 13 de agosto de 2007

Elegía






La niña, rosa sentada.

Sobre su falda,

como una flor,

abierto, un atlas.

¡Cómo la miraba yo

viajar, desde mi balcón!

Su dedo, blanco velero,

desde las islas Canarias

iba a morir al mar Negro.

¡Cómo la miraba yo

morir, desde mi balcón!

La niña, rosa sentada.

Sobre su falda,

como una flor,

cerrado, un atlas.

Por el mar de la tarde

van las nubes llorando

rojas islas de sangre.




Rafael Alberti



domingo, 12 de agosto de 2007

Caducidad



Del árbol de mi vida
se desprende hoja tras hoja.
¡Oh, mundo de delirios,
cómo nos sacias,
cómo nos sacias y fatigas,
cómo nos embriagas!
Lo que hoy aún florece,
pronto se marchita,
pronto sonará el viento
sobre mi tumba parda,
sobre el niño pequeño
se inclina la madre.
Quiero ver sus ojos de nuevo,
su mirada es mi estrella,
todo lo demás puede dispersarse,
todo muere, todo muere gustoso.
Sólo permanece la Madre eterna
de quien procedemos,
sus dedos escriben juguetones
nuestro nombre en el aire efímero.

(H.H.)

lunes, 6 de agosto de 2007

Itaca




Si vas a emprender el viaje hacia Itaca,
pide que tu camino sea largo,
y rico en aventuras y experiencias.
A lestrigones, cíclopes o fiero
Poseidón nunca temas.
No hallarás tales seres en tu ruta
si alto es tu pensamiento y limpia
la emoción de tu espíritu y tu cuerpo.
Nunca a los lestrigones ni a los cíclopes,
ni al fiero Poseidón encontrarás
si no los llevas dentro de tu alma,
si no es tu alma quien ante ti los pone.

Pide que tu camino sea largo.
Que numerosas sean las mañanas
de verano en que arribes a bahías
nunca vistas, con ánimo gozoso.
Detente en los emporios de Fenicia,
adquiere hermosos artículos:
madreperla y coral, ámbar y ébano,
perfumes deliciosos y diversos
--cuanto puedes invierte en voluptuosos
y delicados perfumes.
Visita
muchas ciudades egipcias y aprende,
con avidez aprende de los sabios.

A Itaca tenla siempre en la memoria.
Llegar allá es tu meta,
mas no apresures el regreso.
Mejor que se dilate largos años
y, en tu vejez, arribes a la isla
con cuanto hayas ganado en el camino,
sin esperar que Itaca te enriquezca.
Un hermoso viaje te dio Itaca.Sin ella
el camino no hubieras emprendido.
Mas, ninguna otra cosa puede darte.

Aunque pobre la encuentres, no hubo engaño.
Rico en saber y en vida como has vuelto, comprendes
qué significan las Itacas.